Marcelino García Toral

La conquista de la Supercopa, en la pizarra de TCV (I)

El técnico repasa con The Coaches Voice el torneo ganado por el Athletic en enero de 2021

El 14 de enero de 2021, Marcelino logró su primer gran éxito como entrenador del Athletic Club. Presentado como nuevo técnico del conjunto vasco solo unos días antes, el preparador asturiano afrontaba la semifinal de la Supercopa de España contra el Real Madrid. El encuentro, celebrado en Málaga, acabó con 1-2 para el Athletic (Raúl García hizo los dos tantos, mientras Benzema logró la diana del Madrid). El FC Barcelona sería el rival en la final.

“Éramos conscientes de que nuestra eficacia en el apartado defensivo iba a darnos muchas posibilidades de pasar a la final”, recuerda Marcelino en una clase magistral con‘The Coaches Voice’ usando la pizarra clásica con la que otros entrenadores del mundo han explicado algunos de los mejores partidos de su carrera. Este doble duelo de la Supercopa se puede ver en vídeo a través del canal de YouTube en español.

Como reconoce el entrenador, la suspensión -por razones meteorológicas- del partido liguero que debía disputar ante el Atlético el 9 de enero permitió que la preparación del duelo de Supercopa fuese más minuciosa. Frente al Madrid, con el equipo plantado en su clásico 1-4-4-2, Marcelino buscó marcar la diferencia a través de algunas instrucciones tácticas.

Claves ofensivas y defensivas

En el aspecto ofensivo, en las acciones en las que el Athletic decidía salir con el balón jugado desde atrás, la indicación del técnico era que sus futbolistas se fijasen en cuál de los dos extremos del Madrid iba a la presión adelantada. Así sabrían cuál de los laterales quedaba sin marca y podría recibir la pelota.

“Si éramos capaces de vencer la presión alta del Real Madrid, intentábamos acelerar los ataques lo máximo posible”, revela Marcelino. “Cuando el Madrid bajaba sus líneas, intentábamos abrir el campo con los laterales”, asegura. “Cada progresión buscaba generar superioridades numéricas por dentro”.

En el plano defensivo, la prioridad era tapar el pasillo central, ya fuera en presión adelantada o en bloque medio o bajo. “Teníamos pensado apretar donde estuviera el balón”, señala el entrenador, que insistió en que hombres como Kroos y Benzema entrasen en juego lo menos posible. Tras la recuperación, el plan era realizar transiciones rápidas que dañasen al Real Madrid en su balance defensivo. Fue el primer paso ya que para conseguir el título aún les esperaba en la final el Barcelona, que eliminó a la Real Sociedad en la otra semifinal.